Max Weber expone claramente su posición sobre el sistema
político alemán de la primera parte del siglo XX. En contexto, Weber estuvo en
contra de la primera guerra mundial, creyó que de haber existido un sistema
parlamentario lo suficientemente fuerte como para dar fuerzas sobre un vasto
sector de la burocracia militar que se impuso por sobre el resto del arco
político.
El autor entiende que a medida que se impuso el
capitalismo y la democracia como forma de gobierno, las funciones burocráticas
de estado y quien lleve adelante la tarea de gobernar lo harán como empleados y
dueños de empresas de capitales. Pues la organización de ambos es de alguna
manera similar.
Para Weber el principal problema del sistema político
alemán en el momento en que escribe su obra “Escritos políticos” sería que se
establezca un dominio político de la burocracia a nivel estatal, garantizando a
la democracia como régimen. Prefería una burocracia con criterios técnicos y
objetivos y los políticos de profesión debería velar por los lineamientos y
tendencias particulares de acuerdo al caso. Para que esto pueda ser así, es
necesario que este cuerpo de políticos profesionales sea elegido por la
población, es decir que cuente con una legitimidad dentro del consenso natural
de una democracia. Si el funcionario es elegido arbitrariamente nada nos indica
que podrá tener el control burocrático ya que no cuenta, tal vez, con el
consenso necesario. Por lo dicho, Weber considera que el sistema adecuado debe
ser llevado a cabo por un primer mandatario elegido de manera democrática que
sea capaz de controlar el aparato burocrático.
Para el autor el modelo a seguir es el modelo ingles. Un
parlamento fuerte que inducirá a una política positiva de manera que los
funcionarios sean democráticamente responsables de sus actos de gobierno y
sean, a su vez, capaces de controlar a la burocracia que es elemental para
llevar adelante la tarea estatal.
Con un modelo parlamentario fuerte, no existe lugar para las individualidades y el personalismo político. Por lo tanto, queda suprimido el poder del lider totalitario. Weber lo identificó en la década del 20, un poco más de una década despues, Hitler asumia como primer canciller del Reich, con más del 80% de los votos en elecciones normales.
Con un modelo parlamentario fuerte, no existe lugar para las individualidades y el personalismo político. Por lo tanto, queda suprimido el poder del lider totalitario. Weber lo identificó en la década del 20, un poco más de una década despues, Hitler asumia como primer canciller del Reich, con más del 80% de los votos en elecciones normales.
Prof. Pablo Splawski.